Hace una semana que se cumplió un sueño... Ver al Dulce Nombre de Jesús procesionar por las calles de nuestra feligresía. Un sueño que no habría sido posible sin la colaboración de tantas personas que con su trabajo y dedicación lo hicieron posible... Solo nos queda seguir descontando los días para verlo de nuevo por las calles, hasta entonces recordemos aquel sábado que pasó a la historia. Gracias a todos.
¡Alabado sea Jesús Sacramentado!.